Disminuye el dolor del tratamiento del cáncer de mama con fisioterapia y ejercicio físico

Un estudio desarrollado por la Universidad de Granada ha demostrado que la fisioterapia y el ejercicio físico son la mejor opción para paliar las secuelas de un tratamiento de cáncer de mama. Así, ha desarrollado un programa de ejercicios que permite reducir el dolor musculoesquelético, que padecen las mujeres con este tipo de cáncer.

La operación de este tipo de cáncer provoca, en muchos casos, que las mujeres sufran depresión, una mayor sensibilidad al dolor cervical y una disminución de la movilidad del hombro.

Este estudio ha demostrado que esta terapia resulta muy efectiva para la disminución de la fatiga y mejora el rango de movimiento cervical, la fuerza muscular y el estado general de las mujeres con cáncer de mama.

En este trabajo participaron un grupo de mujeres tratadas de esta enfermedad, en las que se produjeron increíbles mejoras.

Con el programa de ocho semanas basado en ejercicio físico y técnicas de recuperación propias de la fisioterapia, mejoraron los niveles de alfaamilasa salival, la fuerza muscular y la movilidad a nivel cervical y del hombro del lado operado de las mujeres. Además, disminuyó la fatiga y los disturbios en el estado de ánimo.

Y lo que es mejor, tras seis meses de seguimiento, los resultados seguían siendo visibles. Lee el siguiente artículo para conocer sobre el tratamiento del linfedema.

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